Dr. Frankl y Dr. Martínez-Romero en Caracas 1985

miércoles, 7 de diciembre de 2022

lunes, 21 de noviembre de 2022

LOGOTERAPIA COMO PROMOTORA DE LA TRASCENDENCIA RECÍPROCA EN LOS GRUPOS PSICOTERAPÉUTICOS

 


Dr. José Martínez-Romero Gandos

A Coruña – Galicia - España

jmrsentido@gmail.com

 




Me gustaría recordar que desde hace muchos años vengo recomendando a colegas y estudiantes la necesidad de formarse. Para ello es imprescindible la lectura de los libros de Frankl y sus conferencias. Pero también es imprescindible la lectura de autores que fundamentan el Análisis Existencial, base doctrinal que Frankl señala como fundamento de su postura.

En   mayo de 2021 presenté en Amazon mi libro que titulé: “LOGOTERAPIA GRUPAL. Notas para una práctica con sentido y fundamentación Analítico-Existencial” (Martinez-Romero Gandos, J 2021). Señalé, en esa oportunidad, las dificultades enormes que generó un contrato anterior de publicación que no permitió la llegada del libro al público por su elevado costo. Decidí reformular lo propuesto en ese libro con una nueva redacción y aportes, publicada en forma de e-book y ofrecerlo en una red de forma accesible en un futuro cercano. Lo he gestionado personalmente y tiene forma de apunte universitario.

Me van a permitir realizar algunas consideraciones generales antes de abordar el tema que he propuesto para hoy: La Logoterapia como promotora de la trascendencia recíproca en los grupos.y

Vamos a hablar de grupos, verdad? Haremos, pues, algunas consideraciones al respecto.

Los grupos humanos existen desde nuestra pre historia. Miles de años de evolución del proceso de hominización, siempre en grupos, dejando huellas a lo largo de ese proceso.

El Dr. Alberto Araica, de México, conversando con el Dr. Mucci de Buenos Aires se centraba en algunos aspectos referidos a las estructuras sociales que determinan conductas grupales de apatía o indiferencia frente a las migraciones o a la violencia, especialmente en Latinoamérica. Mostró en esa conversación la difícil situación de los marginados en Latinoamérica y sugirió que nuestra tarea, además de superar las diferencias que nos separan y nos cohíben, es ayudar a visibilizar al invisibilizado por el sistema.

En anterior edición de los Premios Goya (España) se entregaron cuatro estatuillas a la película ADUELa película ADU ganó cuatro estatuillas, entre ellas al mejor actor revelación. La película muestra el drama de la emigración de personas de etnia africana que intentan alcanzar Europa. Un niño y su hermana intentando alcanzar la bodega de un avión y miles de subsaharianos intentando saltar la valla en Melilla simbolizan el drama producido en muchos países. Latinoamérica no es extraña a estos acontecimientos sociales de urgente necesidad de solución.

El Dr. Araica señaló que la Logoterapia es muy rica y de ella puede surgir una propuesta desde la Alteridad. Precisamente Alteridad y Alienación desde una perspectiva existencial en migraciones es el tema de mi Tesis Doctoral[1]. También lo he aplicado en mis intervenciones grupales en la asistencia a mujeres víctimas de violencia doméstica, propuesta especialmente desarrolladaen Galicia por varios años luego de mi traslado a esta Comunidad hace 20 años.

El conocer el alcance en cada comunidad de esta actitud violenta hacia las mujeres, deleznable, y actuar para liberar a las víctimas de su situación esclavizante es un desafío de carácter obligatorio para lograr un acercamiento al otro que ayude a eliminar esa violencia. Actuación profesional y difusión de un mensaje a las víctimas para que encaren con valentía su lucha.

Nos decía el Dr. Araica que la antropología frankleana puede ayudar con propuestas que permitan superar esa situación afirmando la alteridad de las personas que padecen o sufren por la indiferencia y apatía de los sistemas establecidos, debiendo todos reaccionar con un compromiso cotidiano con el que está a mi lado, basados en los valores y en el monantropismo.

Resumió su postura diciendo que necesitamos probar el carácter subversivo del sentido y rechazar los fundamentalismos.

El concepto de “subversivo” levantó réplicas de algunos colegas por unirlo estas personas a las actividades agresivas o violentas. Yo intenté mediar en cuanto a las definiciones operacionales que el término suscita proponiendo asimilar el concepto al de “empoderamiento” para señalar lo que los desposeídos o violentados deben conseguir para encontrar ese sentido.

Debemos actuar como Logoterapeutas facilitando la formación de grupos en las comunidades que nos permitan intervenir en las distintas áreas de la vida social. Roberto Mucci, nos dice en sus trabajos que nuestra condición de seres humanos nos convierte a todos en funcionarios de la Humanidad; y debemos hacernos cargo de nuestra realidad social en todos sus sectores.

Se pregunta Roberto: “¿Cuál es nuestro aporte desde los valores al mundo de la política, la economía, el trabajo, la empresa, la educación, la salud, los medios de comunicación, la justicia? Y se responde en esos escritos: cito a Mucci: ”Viktor Frankl nos presenta los valores de creación, de vivencia y de actitud y pienso que podemos sumar una cuarta categoría, a saber, “los valores de servicio”, en el contexto de lo que denomino “la dimensión sociopolítica de la logoterapia”, dentro de los cuales ubico el sentido de la responsabilidad y el sentido del liderazgo personal y social”.

Nos resume para nuestra comprensión: Palabras clave: Logopolítica, liderazgo, responsabilidad, solidaridad, compromiso social, denuncia, servicio, desarrollo personal y social, sentido de vida, constituyendo todo esto la dimensión sociopolítica de la logoterapia. La globalización económica no reconoce personas ni naciones. Individuos y países quedan disueltos en el mercado, socavando la identidad y la dignidad de los hombres y de los pueblos. La logoterapia asume la función de volver inaceptable toda forma de vida indigna del hombre libre.

Por todo esto y mucho más debemos trabajar con grupos sociales para ayudar a superar esos reduccionismos fundamentando nuestra actividad en los postulados de la Logoterapia pero sin dejar de conocer y aplicar los mecanismos fundamentales de la Dinámica Grupal de lo que hablaremos más adelante.

En un trabajo que publiqué en la Revista de ALPE Asociación Latinoamericana de Psicoterapia Existencial, hace algunos años, titulado  LENGUAJE, HERMENÉUTICA Y PSICOTERAPIA EXISTENCIAL, insistía que  según Dilthey, podemos, apenas, acercarnos al conocimiento del otro porque entendemos que la existencia del consultante ha generado estructuras en su personalidad y en nuestro intento de comprenderlo nos dirigimos a tratar de aprehender el sentido de su vida y promover su auto-trascendencia sin dejar de considerar que hay estructuras políticas, de gobierno, de asistencia, etc. que no siempre facilitan el cambio.

Este es un concepto verdaderamente revolucionario y podemos decir hoy “subversivo” en la medida que éste término significa Del lat. subversum, supino de subvertĕre 'subvertir'. Y para el término “subvertir” la RAE nos informa que se corresponde con el hacer que algo deje de tener el orden habitual o característico, especialmente en sentido moral o espiritual.

El carácter conversacional del lenguaje está basado en prioridades de lo hablado sobre lo escrito. Lo hablado descansa en la prioridad del verbum interius, de la palabra interior. El esplendor total del lenguaje solamente se expresa en la conversación. Com-versatio significa “volverse hacia el otro”, “ponerse frente al otro”, estar “frente a frente”. Las proposiciones escritas nunca podrán traducir la complejidad y riqueza de la conversación, sus significados y sus relaciones con la cultura y las comunidades.

Sabemos y lo expresamos así teóricamente que en el despliegue de la existencia mundana cada hombre se enfrenta con la soledad de su proyecto, una tarea formidable que intenta superar la angustia por la finitud de su propia empresa. Cada uno es único e irrepetible frente a este proyecto. Y la tarea se presenta como una lucha constante por sostener el sentido de vida.

Luis Martín-Santos, insigne autor dentro del Existencialismo, termina su libro “Libertad, temporalidad y transferencia en el psicoanálisis existencial” diciéndonos: “Más allá de su neurosis, convertido de esclavo de su destino en inventor de su proyecto, el hombre deviene un ser trascendente” (Martín-Santos, L. 1964). La enfermedad en el plano existencial quedaría definida por un conflicto entre el proyecto vital del sujeto y su estructura interna en una circunstancia dada.

Y nos dice Frankl en El Hombre doliente (Frankl, V.E. 1986 pág. 50): Pero si la humanidad quiere encontrar un sentido que sea válido para todos, debe dar un nuevo paso. Después de haber alcanzado, hace miles de años, el monoteísmo, la fe en un solo Dios, debe llegar a creer en una sola humanidad. Hoy necesitamos más que nunca un MONANTROPISMO”.

Y pasa, inmediatamente, a considerar el concepto de auto-trascendencia, tema que nos ocupa hoy en especial, diciéndonos: Cito a Frankl (op. cit. pág.99 Nota a la segunda edición) “Si el ser humano es un ser espiritual (que trasciende por lo tanto la physis y la psykhé), el logos (sentido) es el aspecto objetivo y la existencia el aspecto subjetivo de esa espiritualidad. Pero ambos quedan salvados y unidos entre sí mediante la auto-trascendencia esencial del ser humano, que yo defino como la super transferencia hacia algo a hacia alguien, hacia un sentido por cumplir o hacia un semejante que sale al encuentro; en todo caso, el ser humano es realmente humano en la medida en que se disuelve en el servicio a una causa o en el amor a una persona; cabe afirmar que el hombre es realmente él mismo, se realiza a sí mismo, en la medida en que pasa por alto y se olvida de sí con la entrega a una misión o a un semejante”.

Vamos a transferir este concepto de auto-trascendencia a la actividad de los grupos logoterapéuticos y afirmar que es necesario ampliarlo para llegar a la consideración de lo que he denominado “auto-trascendencia recíproca”. Esto se lo hemos expresado al Dr. Frankl personalmente en Caracas en el año 1985, en ocasión de una reunión privada con colegas argentinos que habíamos viajado con él hasta Venezuela, donde participó de un Congreso sobre familia y seguidamente otro Congreso de Logoterapia. Escuchó atentamente y mientras yo le contaba mi quehacer en los grupos dibujó unas caricaturas suyas, mía y del Dr. Acevedo que guardo como un tesoro.

En los grupos es posible elaborar y superar la frustración existencial y la carencia de una voluntad de sentido, propias de nuestra sociedad de consumo y nuestro vacío existencial, mediante la apelación y la cura de unos con otros. No llega al “alta” en mis grupos logoterapéuticos quien realizó más cantidad de “catarsis” o ha contado más episodios de su vida sino aquel que ha contribuido de forma permanente en la ayuda a sus compañeros. Y cuando alcanza el reconocimiento grupal de esa calidad de participación. Son los otros los que, fundamentalmente, deciden sobre el alta. Por supuesto que contando con la opinión del Logoterapeuta.

Entonces, podemos decir ahora, de acuerdo a nuestra propuesta que

La “auto-trascendencia recíproca” entre dos o más personas (comunidad) es de mayor valor que la auto-trascendencia de una sola persona hacia el mundo de las cosas, de las tareas o el servicio de los otros. La auto-trascendencia personal prepara la recíproca y ambas se complementan y potencializan.

Debemos estar dispuestos a crear grupos que respondan a la naturaleza espiritual del ser humano, que potencien sus mejores recursos auto-trascendentes y que los integrantes se desplieguen en una dinámica de ayuda mutua.

Uno de los instrumentos fundamentales para sostener esta auto-trascendencia recíproca en los grupos es la comunicación.

Recordar dos afirmaciones fundamentales en cuanto a teorías comunicacionales que, según la importante escuela de la comunicación social de Palo Alto con Paul Watzlawick (1971) quien nos dejó varios axiomas de la comunicación. Entre ellos LOS GRUPOS SON INEVITABLES Y NO PODEMOS NO COMUNICARNOS.

Pertenecemos a varios grupos simultáneamente y nuestra comunicación en ellos depende del contexto, momento y características de lugar, características que influyen en la manera en la que las personas se comportan. Es decir, reaccionamos de manera diferente según el lugar donde estemos, según las personas con las que nos comunicamos y el tipo de acontecimiento, lo que esté ocurriendo en ese momento y la ideología subyacente.

Tener en cuenta que cuando nos proponemos sostener esa auto-trascendencia recíproca es necesario iniciarla con un compromiso público entre los miembros participantes.

Que deseamos transmitir con esto:

En los grupos superficiales, éste conversatorio por ejemplo, esta alianza es poco duradera y no alcanza para la relación de verdadero encuentro y trascendencia. Aunque por nuestro compromiso con la Logoterapia estemos “casi” al alcance de esas condiciones.

Grupos superficiales son los de una excursión, un encuentro de fiesta o diversión e incluso un encuentro de pura atracción sexual. La alianza superficial deberá culminar en un compromiso público si la excursión se transforma luego en un grupo de amigos. En el caso de un encuentro sexual el compromiso público se plasma en el amor de pareja o matrimonial.

El compromiso da lugar a una relación con sentido transpersonal. Supone confianza, fidelidad y esperanza. Es capaz de iluminar y animar en los momentos difíciles. Ese grupo comprometido tiene ejemplos generales en la familia, en las comunidades religiosas, en algunos equipos de trabajo, en ciertos grupos de amigos y, ciertamente, en los grupos logoterapéuticos.

Formamos una comunidad científica muy especial, que basa su trabajo en la consideración del hombre como un ser bio-psico-social-espiritual, libre y responsable, con la posibilidad de transitar en un mundo en el que reconoce su pasado como importante y su presente como necesariamente inestable, proyectando todo esto a un futuro en el que encontrará la muerte y la trascendencia.

Pertenecemos a una comunidad científica en la que estamos abiertos a todos los aportes que signifiquen un avance en nuestro propósito principal de asistencia al otro en el logro del sentido. Seguimos a Frankl en dos vertientes importantes: su doctrina y su postura en cuanto a la “degurificación” de la Logoterapia.



Tanto en la actividad clínica como en las actuaciones institucionales el Logoterapeuta debe ser conciente y lograr que también lo sea su consultante que, en estos momentos de la sociedad en la que vivimos con claros síntomas de crisis social, la vida del hombre común de la calle y la del que sufre pérdidas, carencias, angustias o discriminación, debe seguir teniendo sentido “a pesar de todo”.

Me gustaría llamar la atención sobre un tema importante: La actividad clínica se realiza únicamente por profesionales formados en lo que denominamos “conocimiento de la psicopatología” y fundamentalmente esa actividad le pertenece a psicólogos, médicos o psiquiatras. En las actuaciones en instituciones, comunidades sociales, religiosas, filosóficas o políticas puede ser encarada la transmisión de la LOGO-ACTITUD por personas que han adquirido formación específica en los fundamentos de la Logoterapia en cursos, conferencias o seminarios. En estrictu sensum lo que transmiten esas instituciones no es Logoterapia como sinónimo de psicoterapia frankleana. Deberíamos llamarlos GRUPOS DE LOGO-ACTITUD

Los instrumentos fundamentales para sostener esta auto-trascendencia recíproca son la comunicación, el reconocimiento mutuo, la afirmación de la identidad personal y comunitaria, la autenticidad, la apelación y la cura.

Cada uno de estos conceptos merece un conversatorio como el actual, en especial, a ellos dedicado.

En su libro “Psicoterapia y humanismo” en el que dedica todo un capítulo a lo que denominó “la crítica del puro encuentro” Frankl nos dice que “El grupo de encuentro adecuadamente concebido no sólo favorece la autoexpresión de sus miembros, sino que promociona también su auto-trascendencia”, (Frankl, págs. 71/ 86)

Podemos leer sobre antecedentes de esta consideración de Frankl de los grupos de encuentro en cartas entre Elisabeth Lukas y Fabry en el libro “TRAS LAS HUELLAS DEL LOGOS” o releer el libro de Paco Bretones “LA LOGOTERAPIA ES OBVIA”

Podemos, a esta altura de nuestra presentación, citar a algunos autores reconocidos.

Por ejemplo, Alfred Längle citando nuestro tema principal en su libro “Viktor Frankl. Una biografía” (Längle, A. 2000, pág. 77) dice: “En la vida de Frankl fue una divisa personal el deseo de consagrarse a otros, el llegar a ser él mismo viviendo por completo para otros. Esa idea directriz se convertiría más tarde, bajo el concepto de auto-trascendencia, en un componente esencial de la logoterapia. Frankl ostentaba siempre esta divisa, no sólo como médico. También era el ideal que regía en sus conferencias”.

El mismo Längle cita un encuentro entre Heidegger y Frankl. Nos dice que hablaron en primer término de la temporalidad de la existencia y del estar-en-el-mundo de los hombres. Al final Heidegger dijo: “Si no le entiendo mal, señor Frankl, lo que usted expresa con su concepto de “auto trascendencia” es incidentalmente el mismo que expreso yo con el mío de “estar-en-el-mundo”.

Entre los argentinos, el Dr. Juan Alberto Etcheverry, en su libro Viktor Frankl y la Logoterapia. (Etcheverry, 1990) nos relata cantidad de información sobre los viajes de Frankl a América, y nos dice: “La dimensión espiritual está lejos de ser bien representada como una esencia puntual. Frankl habla del “eje de la persona”. Es un vector cuyo cuerpo indica dirección u orientación en lo profundo de la persona (haciendo la salvedad de que no estamos hablando precisamente de ubicaciones topológicas) y cuya punta de flecha indica sentido (hacia la auto trascendencia). Se habla de auto trascendencia en cuanto pertenece a la esencia del hombre el ir hacia más allá de sí mismo”. (Etcheverry, 1990 pág. 49).

Otro filósofo argentino, Nolberto Espinosa trata, en su libro “La concepción de la conciencia en la logoterapia de V. Frankl” (Espinosa, N. 1990, pg. 65 y sig.), el tema de la auto trascendencia relacionándolo con las teorías de Heidegger y Nietszche, especialmente en cuanto a los conceptos de existencia y libertad.

El pensamiento médico-antropológico de Frankl es objeto de un pormenorizado análisis crítico realizado por el médico argentino Mario Caponnetto .(Caponnetto, M. 1995, Viktor Frankl: una antropología médica, págs.. 226 y sigs.). Opina Caponnetto que era necesario dotar de nuevas armas a la Psicología y resalta que Frankl la dotó de una fuerza y altura nuevas al incorporar los conceptos de auto-trascendencia, el auto-desprendimiento y el olvido de sí mismo, citando el libro de Frankl “Ante el vacío existencial” (Frankl, 1984 pág. 17) con conceptos que nosotros hemos mencionado anteriormente.

Si a esta altura de nuestra presentación aún quedaran dudas sobre la importancia del concepto de auto-trascendencia para la labor grupal en el campo de la Psicología no cabe más que recurrir al libro del Dr. Francisco Bretones, Paco para muchos de nosotros, quien nos dejó una intensa vida de compromiso con la logoterapia, con su comunidad y con el común de la gente a través de sus aportes, especialmente en el libro “La Logoterapia es obvia” (Bretones, 1995). Allí encontramos un importante capítulo destinado a tratar el tema de los “Grupos de reflexión para la auto-trascendencia”, como el los llamara y testimonios importantes de los protagonistas de la “obviedad de la Logoterapia”.  En un párrafo de ese libro (pág 95 nos dice: “El grupo de reflexión para la auto-trascendencia, sin pretenderlo, practica una de las técnicas para vencer o enfrentar las obsesiones, las depresiones y todo tipo de conflicto que nos encierra dentro de nosotros mismos. La desreflexión (s.i.c.) nos libera del ensimismamiento, que está presente, en mayor o menor escala, en casi todos los conflictos psicológicos”

En la Argentina somos muchos los que podemos comentar lo que Frankl opinaba sobre la auto-trascendencia. Esto es así porque asistimos, entusiasmados y atentos, a sus conferencias dictadas en Buenos Aires en el mes de abril de 1985. Precisamente la segunda de ellas la tituló “Auto-trascendencia de la existencia humana”. Ésta y otras dos conferencias pueden leerse en el opúsculo que se publicara bajo la dirección de Juan Alberto Etcheverry (Etcheverry, 1991). En la conferencia que citamos nos habló acerca de la juventud y su relación con el pasado, del Síndrome del Taxi y por supuesto de nuestro tema de referencia. Su estilo en la conferencia nos queda grabado en nuestro recuerdo de sus brillantes 80 años de entonces que son por los que transitamos nosotros ahora.

Para ir concluyendo con mi presentación, que se alarga en cada detalle porque el tema es más profundo que lo que yo puedo abarcar, les dejo una regla nemotécnica que siempre nos permitirá tener presente las bases doctrinales para nuestra tarea como Analistas Existenciales y Logoterapeutas.

P_E_R_LI_CU_T_E

El ser humano es posibilidad, elección, responsabilidad, libertad, cura, temporalidad y espacialidad.

En otra presentación organizaremos algo para explicar lo que mencionamos como Instrumentos fundamentales en la aplicación de la Logoterapia Grupal.

       La apelación.

       El encuentro.

       El auto-distanciamiento

       La esperanza.

       Empatía y asertividad.

 

Y también sobre las técnicas, siempre al servicio del otro.

       La formación de los grupos

       Apertura y cierre

       Ejercicios de participación grupal

1.      Culpa

2.      Posibilidad

3.      Libertad

4.      Responsabilidad

5.      Cura

6.      Espacialidad

7.      Temporalidad

 

Referencias Bibliográficas:

Bretones, F. (1995) La logoterapia es obvia. Editorial San Pablo, Buenos Aires.

Caponnetto, M. (1995) Viktor Frankl, una antropología médica. Examen crítico de los fundamentos médico-antropológicos de la Logoterapia. Instituto Bibliográfico “Antonio Zinny”, Buenos Aires.

Espinosa, N. (1994) La concepción de la conciencia en la logoterapia de V. Frankl, Editorial San Pablo, Buenos Aires.

Etcheverry, J. A. (1990) Viktor Frankl y la Logoterapia, Editorial Almagesto, Buenos Aires.

Frankl, V. E. (1982) Psicoterapia y humanismo. ¿Tiene un sentido la vida?, En Breviarios del F.C.E., México-Madrid.

Frankl, V. E. (1984) Ante el vacío existencial. Editorial Herder, Buenos Aires.

Frankl, V. E., (1986) El hombre doliente. Fundamentos antropológicos de la psicoterapia, Editorial Herder, Barcelona.

Längle, A. (2000) Viktor Frankl. Una biografía. Editorial Herder, Barcelona

Martínez-Romero Gandos, J. (2015) Lenguaje, hermenéutica y psicoterapia existencial. Publicado en la Revista Latinoamericana de Psicoterapia Existencial. Año 5, Nº 10, abril de 2015. También publicado (con autorización de ALPE) en   Rev. NUFEN vol.9 no.3 p.140-149. ISSN 2175-2591 Belém, 2017.

Martínez-Romero Gandos, J. (2021) Logoterapia Grupal. Autotrascendencia recíproca. Fundamentación y práctica. Editado por Amazon.

Martínez-Romero Gandos, J. (2022) Psicoterapia fuera de la consulta. Encuentro e interacción desde la Analítica Existencial y la Logoterapia. Editado por Amazon.

Martín-Santos, L. (1964) Libertad, temporalidad y transferencia en el Análisis Existencial, Editorial Seix Barral, Barcelona.

Mucci, Roberto J. (2022) Logopolítica. Dimensión social y política de la Logoterapia, Editorial Guadalupe, Buenos Aires.

Waltzlawick, P.; Beavin, J.; Jackson, D.D.; (1971) Teoría de la comunicación humana, Tiempo Contemporáneo. Buenos Aires.



[1] “Alteridad y alienación en emigrantes gallegos al Río de la Plata. Su comprensión existencial”. Tesis Doctoral de José Martínez-Romero presentada en la Universidad del Salvador, Buenos Aires.

jueves, 15 de septiembre de 2022

LA GLOBALIZACIÓN ES EGOÍSTA. ALTERNATIVA: LA SOLIDARIDAD

 


La globalización nos somete a cambios y presiones a veces no deseados. Ante la incorporación a esta etapa del desarrollo mundial sin una verdadera elección por nuestra parte debemos prepararnos para no perder, ni un ápice, nuestra condición de Persona.

A pesar de los beneficios atribuidos a este fenómeno para el desarrollo de la Humanidad nos han tocado algunas consecuencias inmediatas no del todo gratas: RECESIÓN, POBREZA GENERALIZADA Y ESTRUCTURAL, DÉFICIT ECONÓMICO GENERAL Y FAMILIAR. Padecemos un altísimo déficit económico y social. Las consecuencias de este proceso caen sobre toda la población y los economistas del Establishment aún no han encontrado soluciones.

Un ejemplo posible es recordar que la igualdad de oportunidades que muchos emigrantes encontraron en los países de acogida no se construyeron en base a la inversión de capitales sino a partir del trabajo y creatividad de estas personas en los diferentes países a los que arribaron.

En los periódicos aparecen a diario comentarios acerca de la importancia de los capitales que grupos de inversión colocarán en los países en crisis. Estos inversores prometen importantes transformaciones para nuestras economías. Pero su interés se verá condicionado por la posible rentabilidad de sus inversiones que dependerá del crecimiento y éste de la creatividad y motivación de los encargados para manejarla.

La economía globalizante tiende a motivar el esfuerzo individual para que la persona obtenga ventajas De esta forma no se contribuye al bien común, la comunidad se resiente, los éxitos de UNOS se convierten en fracasos de los OTROS. La lucha se establece por el bienestar personal, el ascenso económico y social, la posesión de bienes. En este tipo de relaciones comunitarias cada hombre es un potencial enemigo de su vecino o compañero de trabajo, su familia y aún los amigos. El resultado es el aumento de la agresividad, dificultades en las relaciones interpersonales y una ansiedad general. Muchas instituciones tienden a programar la distribución indiscriminada de pseudos beneficios sociales, siempre generales, mínimos y decididos por el poder. Se desconocen las condiciones individuales, las conformaciones culturales y la libertad del Hombre.

Estas instituciones tienden a seguir mal el modelo evangélico ofreciéndo pescado y a veces la caña de pescar. Pero nunca se ponen al lado del que necesita para acompañarlo en la búsqueda.

En estas líneas intentamos llamar la atención sobre la verdadera esencia del Hombre. De una manera u otra tratamos de alertar sobre las utopías. Aquí denunciamos, una vez mas, el hambre, la desocupación, la miseria, el aumento de la deuda, flagelos con los que cerramos el Siglo XX y aún continúan en el nuevo siglo.

Sin posibilidad de clonación, cada Persona necesita cuidados que van ligados a un complejo entramado psicosocial en la que manifiesta sus valores y desarrolla sus propios procesos de adaptación. Solamente en una perspectiva holística del problema podremos descubrir las verdaderas necesidades del Hombre. La génesis de este proceso es UNIVERSAL. Universal, que no globalizante porque cada persona es única e irrepetible, libre y responsable para decidir sobre su futuro y su autotrascendencia.

Cuando la consideramos en estas dimensiones bio, psico, social y espiritual queda claro que la totalidad del Hombre no puede reducirse a un solo fenómeno y debe entendérselo como una unidad de sentido y como una unidad estructural. En esta pluralidad de dimensiones el Hombre experimenta el sí mismo y su relación con el mundo.

Cuando busco el sentido de mi vida lo primero que descubro es mi asombro ante la existencia. En especial ante esta existencia vaciada de sentido por la sociedad consumista.

Aristóteles decía que con el asombro comienza la Filosofía. Nos va a servir de mucho esta contemplación filosófica de la realidad, auxiliándonos con la Antropología, la Sociología, la Psicología y por supuesto la Economía.

Cuanto mas reflexiono sobre mi existencia mas oscura veo mi existencia particular. La comprensión, la inteligencia y el lenguaje me quedan cortos para explicar esta realidad que produce hambre, desocupación, miseria y agresión. ¿Cuál es la actitud específicamente humana a seguir? Es una época difícil para dar lugar al asombro.

En este mundo con influencia globalizante de los poderes temporales y la economía las soluciones propuestas vienen de la mano de alianzas empresariales, aumento de los negocios en la Web, crecimiento sostenido de las principales potencias, cambios en las bolsas mundiales, etc.

¿Y el hombre?

A este hombre de la era de la globalización se le promete “mejor calidad de vida”. Esta promesa pretende afirmarse en un aumento de la asistencia sanitaria, en un mejoramiento de los niveles de vida y cambios sociales adecuados a las exigencias de la hora. Las consecuencias no deseadas son el aumento de la población de mas de 65 años, las carencias en la educación de una extensa franja de la población y la “pobreza estructural”.

El desafío es construir un sistema en el que la solidaridad sea el centro. La vertiginosidad con que la globalización difunde sus mensajes impide a los ciudadanos una elaboración crítica y ética de su verdadera influencia. Deslindar la verdad es muy difícil e impide la expresión auténtica de sentimientos y proyectos.

Desde nuestra posición ideológica debemos reconocer los cambios en la realidad social pero alertar sobre las posibilidades, casi seguras, de caída en el vacío existencial, en la vida sin sentido y en la superficialidad de la actividad cotidiana. Debemos preocuparnos intensamente por ese futuro.

La esperanza de vida aumenta y con ella la necesidad de asistencia especializada. Los sectores que necesitan más apoyo son los ancianos, los desocupados y los niños La carencia de modelos aptos para la consideración respetuosa de la Persona permiten el aumento de la delincuencia, las adicciones y las conductas agresivas.

La gerontología, una disciplina aún joven, no hace sino retomar los estudios científicos especializados que todas las culturas consideraron de vital importancia y que honraron a lo largo de su historia previendo una ancianidad plena y respetada. La Logoterapia retoma ese desafío milenario y propone agregar vida a los años y no solamente años a la vida.

Prever los problemas psicopatológicos derivados de sentimientos profundos de soledad provocados por esta sociedad globalizada, vigilar la aparición de comportamientos alterados que modifican e impiden esa plenitud de vida, encarar las sutiles y a veces brutales circunstancias en las que se altera la convivencia familiar y contribuir al bienestar de nuestros niños y mayores, es el desafío de la hora.

Las alteraciones mencionadas son multifactoriales. Una inadecuada utilización de los recursos de las comunidades lleva al aumento de los problemas mencionados, limitando la pretendida eficiencia del sistema.

La gestión de proyectos que incorporen rápidas y profundas innovaciones en la atención sanitaria y en la educación son los parámetros iniciales necesarios. Aceptar la sugerencia de los economistas implica buscar formas modernas de aumento de la eficacia y la eficiencia del sistema. Pero esta eficiencia debe complementarse con la actividad comunitaria que genere en la población espacios culturales para evaluar sus propias necesidades y encontrar criterios definidos para que las soluciones sean, cualitativa y cuantitativamente, aceptables y aceptadas por todos. Esta es la verdadera innovación.

El concepto de “salud” de la Organización Mundial de Salud comprende el bienestar biológico, psíquico, social de las personas y no solamente la ausencia de enfermedad. Los técnicos diferencian “salud objetiva” de “salud subjetiva” definida la primera como “la capacidad para la función” y la segunda como “la significación que la persona otorga al sentirse bien”.

La economía provee los parámetros necesarios para el desarrollo de un aspecto esencial de las comunidades. Pero no el principal. Sin posibilidad de clonación, cada persona necesita cuidados que van ligados a un complejo entramado psicosocial en el que se encuentra ligado afectivamente, en el que manifiesta sus valores personales y en el que desarrolla sus propios procesos de adaptación. Solamente una perspectiva holística del problema permitirá descubrir sus verdaderas necesidades. La génesis de este aspecto evolutivo humano es universal. Universal, que no globalizante, porque cada persona es única e irrepetible, libre y responsable para decidir sobre su futuro y sobre su autotrascendencia. La globalización no siempre permite este aspecto esencial de la Persona. Si no es obligado a abandonar aquello que le pertenece por esencia, el hombre es capaz de incorporarse a un proceso intenso de desarrollo como el que comentamos. La condición es el respeto por su esencia: la libertad.

¿Cómo es posible aumentar la solidaridad en un mundo egoísta, consumista y superficial? Volviendo a lo clásico sin abandonar lo actual.

Mostrar a los responsables de la producción que sin la debida motivación, sin el ejercicio periódico de la creatividad, sin la esperanza en un bienestar futuro para su familia, sin la atención sanitaria debida, sin educación generadora de estructuras valorativas, el Hombre se aliena y rinde menos.

¿Podrán las empresas redescubrir estos conceptos? Si alertamos a los ejecutivos que las dirigen que ellos caen, rápidamente, en la pendiente del proceso si no modifican el ángulo de visión de sus técnicas productivas, sí habrá cambios.

Los jóvenes necesitan una fuerte motivación que movilice sus potenciales creativos y productivos. Ellos ven el porvenir con nubarrones y dejan cesantes sus energías solamente dirigidas a sostener una vida provisional llena de adicciones, agresiones o depresiones. Cada día aumenta la marginación y muy pocos de ellos llegaran a ser los ejecutivos a los que les proponemos este esquema.

Recordar que el hombre es lobo del hombre llega a tiempo para reconocer que también es el que ha desarrollado su creatividad hasta los límites insospechados de la actualidad. Luz y sombra de la historia. Creación y destrucción. Amor y guerras.

Apuntemos al amor y a la solidaridad.

Desde el punto de vista de los rendimientos empresariales estos parámetros resultan de fácil aplicación, aumentan la estima personal de los funcionarios y mejoran el logro de utilidades. Fácil presentación, difícil demostración.

Aumenta el índice de desocupación. Los principales actores, preocupados por este fenómeno, son los Ministros de Economía. ¿No debieran preocuparse los Ministros de Salud y de Educación?

Algunas grandes empresas organizan Fundaciones para contribuir al desarrollo de tal o cual aspecto social y canalizar por esa vía fondos que debieran entregar al Fisco como impuestos. De esta forma parecen ser solidarios y aprovechan el efecto de promoción de su empresa. He analizado un listado de Fundaciones creadas por Empresas. En ninguna se promueven cursos de formación de “colaboradores solidarios”. He aquí la sencilla fórmula de desarrollo comunitario ya señalada en la Biblia.

La formación de estos “colaboradores solidarios” permitiría un doble efecto positivo inmediato.

El hombre común, sin ninguna elaboración intelectual, sin la necesidad de ningún estudio sistemático, vivencia esta naturaleza espiritual de su ser Persona. Vivencia esta angustia por su finitud y se esfuerza en su autotrascendencia. No se le escapa que su vida vale la pena vivirla, plenamente. Y se esfuerza para encontrarle sentido a pesar de las circunstancias que, inevitablemente, lo rodean y frustran muchos de sus proyectos.

En muchas oportunidades encuentra ese sentido a pesar del sufrimiento que le produce el dolor por la pérdida de un hijo, el dolor físico de una enfermedad o trauma, la carencia de un empleo o una casa, o la necesidad de enfrentar catástrofes naturales.

Si el Hombre es capaz de esto y mucho mas, ¿Porqué llega hasta nosotros como psicoterapeutas en busca de ayuda? Algunos porque se encuentran en una profunda crisis frente a estos avatares de la existencia. Otros porque reconocen que padecen síntomas desagradables, penosos, indeseables, que amenazan la tranquilidad de su existencia. Aquellos porque no han podido superar estos trances y dirigir su dolor hacia algo o hacia alguien a quien amar, cayendo en la angustiosa sensación de la carencia de sentido.

Todos buscan la “cura”, el cuidado de un otro. Ese “otro” puede ser hermano, amigo, hijo o compañero. Muchas veces esta compañía es el verdadero trampolín que los coloca, nuevamente, en la senda del sentido.  Aceptan la transitoriedad de la existencia, superan el sufrimiento y recobran la esperanza.

Cuando esto no es posible recurren a un profesional en busca de la “cura”. Según de que “cura” se trate consultan a un médico, un psicólogo, un psicopedagogo o un religioso. Cualquiera de estos profesionales es la persona que “impulsada por su eros terapéutico, aprovecha su preparación técnica para cuidar a sus semejantes, como prójimos, cuando lo necesitan o están enfermos”.

Esa es nuestra “Misión”. Pero una misión debe enunciarse en forma operativa, de lo contrario, será una mera declaración de buenas intenciones. Según Viktor E. Frankl, nuestra “Misión” como Logoterapeutas es la “cura médica de almas”. Es una pastoral “médico-psicológica”. Según los griegos, la persona encargada de “cuidar” el cuerpo era el “mëdos”, derivando de allí la palabra “médico”. Para esa cultura el “therapeutikós” era el siervo encargado de cuidar el templo, es decir, el lugar por excelencia para la vida espiritual.

Quienes nos dedicamos a esta profesión, y en especial los Logoterapeutas, aceptamos y reconocemos nuestra “Misión” como aquella destinada a colocarnos al servicio del otro para ayudarlo a mejorar sus “dolencias” cuando éstas lo agobian, librarlo de su angustia cuando el daño es positivo y facilitar su reencuentro con el sentido, a pesar de todo y contando con los valores de su propia existencia.

Deberíamos contribuir con nuestra experiencia para el desarrollo de una acción logoterapéutica que se proyecte sobre la comunidad contribuyendo a la promoción y perfección del Hombre en función de valores éticos de solidaridad, logros en el marco superior de la responsabilidad social y calidad de vida respetuosa de la dignidad  de la Persona. La Ciencia y la Técnica tienen que estar al servicio del Hombre y no a la inversa. Ambos, logoterapeutas y pacientes, debemos ser fieles a esta Misión.

Nuestra “Misión” no necesita de grandes tratados de Psiquiatría, Psicopatología o Técnicas Psicoterapéuticas. Los “Maestros” y “Tratadistas” han contribuído a nuestra formación básica imprescindible. Ahora nos basta la definición del diccionario: “Misión es la acción de enviar. Es el poder que se dá a un enviado para cumplir su cometido. Es, también, el deber moral que cada hombre le impone su condición o estado”.

Somos enviados para servir en la “cura” o cuidado del otro y es para nosotros un deber que nuestra condición nos impone. “Pastores de almas” que buscan encarrilar la oveja hacia la recuperación del “sentido” de vida. El Derecho nos otorgaría la condición de “curadores ad-bona” que define a quien cuida los bienes de un incapacitado. ¡Y qué mayor incapacidad que carecer de la voluntad necesaria para encontrar sentido a la vida a pesar de todo!

Esa es nuestra “Misión”. ¿Y cuál es nuestro pago? El diccionario vuelve a ser útil para definir la cuestión citando la acepción que atribuye a “Misión: alimento que se señalaba a los segadores por su trabajo”. El cumplimiento de la Misión es nuestro alimento y pago verdaderos.

¿Cómo podemos lograr estos propósitos en esta sociedad en crisis?

Debemos ajustar nuestra Misión para afirmar, repetidamente, el concepto de Logoterapia como propuesta facilitadora del desarrollo de proyectos y valores. Una propuesta que debe considerar la posibilidad de comunicación efectiva y afectiva,  promover la reflexión sobre los valores y el sentido de la vida, no olvidar la integración psicológica y social y facilitar la armonía entre la libertad y la responsabilidad.

Nuestra tarea como Logoterapeutas es preguntarnos si podemos hoy ayudar al Hombre existencialmente frustrado a encontrar un sentido en su vida. Muchas personas piensan que tal  vez  es tarde para esta tarea en un mundo totalmente globalizado, en crisis y vacio existencialmente. Creemos que no.

Concluimos que es necesario considerar la posibilidad de establecer una sociedad basada en el respeto por la Persona. Esta persona necesita obtener el máximo de oportunidades para realizarse dentro de la comunidad de su elección, desarrollar y usar sus potencialidades y encontrar un trabajo digno.

En ese contexto es posible que pueda dar y recibir, encontrando en la comunidad su oportunidad de ser solidario.

Nuestra propuesta consiste en la creación de un ESCUDO PROTECTOR de la influencia nefasta de la globalización.

La construcción de ese escudo es posible:

·       Si aportamos soluciones innovadoras ante la crisis social

·       Si hacemos lo posible para que se transformen las actitudes agresivas en AMOR

·       Si contribuimos a que los que tienen predilección o tendencia a luchar por el poder transformen su actitud en acciones de verdadera AUTORIDAD

·       Si facilitamos la solución de las conflictivas relaciones interpersonales y aportamos un sentido COMUNITARIO

 

“La reciprocidad, nuevo paradigma para las relaciones de ayuda, puede ser que nos ayude en esta propuesta. La esterilidad del pasado es sustituida, en el contexto presente, de tal modo que la persona cambie su horizonte futuro y se encuentre con el otro en una relación de ”persona a persona”, con acciones de acuerdo a los más altos valores y con un ejercicio continuo de responsabilidad”

 

viernes, 26 de agosto de 2022

The psychotherapist moves away from his consultation. Encounter, interaction and complementarity are seen from the Existential Analysis and Logotherapy.

 Original book published in Spanish by Amazon Books. Paper version and e-book

 

Dr José Martínez-Romero Gandos

August 2022.

 ABSTRACT

A different way of psychotherapeutic consultation through the presence of the therapist outside of his habitual office and the encounter with the patient in his particular circumstance to provide different ways of approaching reality.  The experience works to open to new meanings in the relationship with one atmosphere of commitment.

KEYWORDS: consultation, encounter, existential psychotherapy, logotherapy, external psychotherapy.

 

CURRENT PROFESSIONAL ACTIVITY

Psychologist (U.B.A). PhD in Psychology (USAL Argentina and University of Corunna, Spain). Former Director of the Psychology Career at the USAL. Member of societies of Logotherapy and Existential Analysis

POSTAL ADDRESS

Dr José Martínez-Romero Gandos

Rúa dos Osos, 8   3º A

C.P. 15142 – ARTEIXO

Pcia. de A Coruña – Spain

jmrsentido@gmail.com

 

 INTRODUCTION

            In this paper, we will try to explain our experience in assisting patients who consult a psychologist. In the course of these interactions, after the professional adjusts his diagnosis, prognosis and treatment, we will show that the continuity of these "encounters" was not always carried out in "consultation" in the usual work of the professional.

           These concepts will not only help trained professionals but also solve the needs and the doubts of young graduates of the Faculties of Psychology, in any corner of the planet, who put their motivation and professional work to start attending the other according to the canons obtained in their training and the respect for the laws and general provisions in each community.

           They have had internships in that training. Now, they should be oriented to the search for a position in the official health activity, in a private clinic or open their private consultation.

Etymologically, the term "consultation" derives from the Latin "consulere" (Unus peritus, si necesse est, consuli possunt. An expert, if necessary, can be consulted.) We express this "valetudini consulens" as "health consultation".

           When a person goes to a psychologist we also talk about "consultation." The consultation is the time in which the patient is next to the professional in a certain space (the office), while the professional gives his opinion and recommends the steps to follow.

            But does everything have to happen in a certain space? It will be controversial but we can say "not always".

           We will try to explain our experience in assisting patients who consult a psychologist. In the course of these interactions, after the professional adjusts his diagnosis, prognosis and treatment, we will show that the continuity of these "encounters" was not always carried out in "consultation" in the usual work of the professional.

            We describe the psychotherapeutic process as a series of meetings in which who is attending a psychologist provides a controversial situation of his existence that he must confront with his reality. In the consultation, he or she will look for answers that will arise in the therapeutic relationship by providing a different vision and projection of those situations. In these confrontational situations, it is possible that on many occasions we can disagree, and where we examine together the diverse and divergent ways that we have to give new meanings to these issues and to experience the issues on which we reflect together. The existential-phenomenological understanding that we seek underlines the differences of appreciation and experience of each one, just to keep us open to new meanings, and to be able to confront them attentively.

           The existential therapeutic encounters are far from being "relaxed moments", they are rather an atmosphere of alert attention to the construction of meanings, to inter-relational processes, and to how the existence unfolds through the shared analysis of experiences.

           Our style of psychotherapy is based on the analysis of the experience that is displayed moment by moment, through the therapeutic relationship. Viktor E. Frankl (1978, pg. 66) noted in his book The unheard cry for meaning. Psychotherapy and Humanism that “True encounter is a model of coexistence that is open to the logos, allowing the partners to transcend themselves toward the logos, and even promoting such mutual transcendence”. Promoting that "coexistence" and dialogue is how we are entering the world of another person. Being together connected always involves coexistence.

           The Existential Analysis and Logotherapy support an anthropological, philosophical and humanistic foundation that seeks to understand human existence based on the experience of psychotherapists, especially as regards the affective, historical, unique and unrepeatable level of each human being, valuing freedom of each of the members of the meeting to make elections. Choosing generates anguish, the anguish of existence in the face of the use of freedom. The anguish that is generated in each election because it reflects what we are going to achieve and forces us to take responsibility for it, whether the solution is positive or negative. In the case that we consider the choice to accept the surgical intervention, it resulted in post-operative success, the reduction of anxiety and fears, the modification of the attitude towards reality and the achievement of well-being.

           From the second half of the 20th century, we observe that the attitude in hospitalization services is changing and the staff encourages important changes in infrastructure and patient care. A current example: in a Hospital in Alicante, Spain, the rooms and halls of the Children's Oncology Service have recently been painted with ad-hoc drawings with the collaboration of local Arts students. Applause for the initiative. As well as applause by volunteers who "crochet" or make fun style bags to cover the serum bags of the children admitted.

           What matters is not only assistance at the biological level but also the corresponding psychological and social. In England, at the School of Psychotherapy, under the Direction of Emmy van Deurzen, a Master in non-religious “pastoral” care is offered in hospitals, prisons, schools and armed forces training psychologists in this type of care, which also includes, weddings, funerals or imposition of names, all from a secular and professional perspective. Emmy van Deurzen is a reference and a very authoritative voice in European academic training. His Master offers instruction in “non-religious pastoral care” that corresponds to the concept expressed by Frankl when he refers to the “medical cure of souls”. We quote Marta Guberman (2005, pg. 36) when she says: “The cure of medical souls is an attempt by the doctor to apply his art and technique while preserving the human character of the encounter. "The cure of medical souls" does not have to be confused with religion or psychotherapy, because it does not attempt the salvation of the soul as the first nor substitutes the second." (Original in Spanish)

           We talk about the encounter, coexistence, self-transcendence and psychotherapy as a process in which the consultant presents a series of conflicting situations that he must confront with his reality. The patient seeks answers and will find them in the therapeutic relationship that will provide a different view of these situations.

            We insist that the main issue of our work is to describe the professional work of the Psychologist who leaves your office to attend particularly. The Psychologist who "goes out" and acts outside his work office, is not a less qualified professional or violates any Code of Ethics as there is an obligation in all countries to seek the welfare of the applicant for assistance, which is the primary purpose of the profession.

           We mention here that psychotherapists can attend weddings, funerals, births or ad-hoc shows. What is the scientific evidence regarding these types of practices and about Existential Psychotherapy? Science has as its object of knowledge the man in his facticity (psychophysical dimension, historical, cultural and social environment). To which we add the spiritual dimension. Science can explain but cannot understand the meaning that transcends that immanence that it studies. Therefore, when treating Man, we value his being a unique and unrepeatable person, with the capacity for freedom, responsibility, meaning and values capable of interpreting the demands of life, affirming that it makes sense, despite everything.

            It may be pertinent that we now recall some concepts that may come close to the definition of Existential Psychotherapy that was developed between 2014 and 2016 by an international group of professionals grouped in the World Confederation of Existential Psychotherapies (2016), which represents a cross-section of contemporary existential therapists who, in a cooperative effort, wrote a well-founded definition that was published in the Latin American Journal of Existential Psychotherapy translated by us at the time.

            Our colleagues said: “… In any case, we can say that, although it is difficult to formalize and define, as we feel it, Existential Therapy is a profoundly philosophical approach characterized in practice by an emphasis on relatedness, spontaneity, flexibility, and freedom from rigid doctrine or dogma. Indeed, due to these core qualities, to many existential therapists, the attempt to define it seems contradictory to its very nature.”

           We wish to underline from this definition the concept of “spontaneity” and that of “flexibility”, both essential for a proposal like the one we are making here. It is not less, of course, the concept of "emphasis on the relationship." On this last concept, we have abundant bibliography.

           In general, among Existential Psychotherapists, we agree that psychotherapy is always more than a technique because it includes an element of art and is always more than a mere science insofar as it also includes an element of wisdom. In this sense, Art and Science form a unity and totality where the dichotomies between technique and encounter disappear and dissolve. In our clinical practice, we certainly use some techniques (Socratic dialogue, paradoxical intention, stop reflecting) and some intermediary elements (masks and puppets) to promote the relationship and the achievement of certain objectives without losing sight of the person. (Frankl 1988; Martínez-Romero Gandos J. 2011, 2016, 2017; Martínez Robles, Y. A. 2010)

           The definition of Existential Psychotherapy cited above (op cit. 2016) adds that: “… the therapeutic objective is to illuminate, clarify and place these problems in a broader perspective to promote clients' ability to recognize, accept and actively exercise his responsibility and freedom: choose how to be or act differently, if such change is desired or, if not, to tolerate, affirm and embrace the choice of his ways of being in the world.”

           And they insist, later: “… This technical flexibility allows some existential therapists the freedom to adapt to the particular response or intervention to the specific needs of the individual client and to the therapeutic process that is continually developing. However, regardless of whether or not to use methods in existential therapy, these are intentionally chosen to help illuminate the person's being at this particular moment in their history.”

 

CASES

For a better understanding of the cases attended outside the consultation, we present a table with the basic references. Then we will briefly expand the corresponding data.

 

FICTITIOUS NAME

HEALTHS ROBLEMS

APPROACH OUTSIDE OF PRACTICE

Peter – 35 years old

Phobic state - Inability to go outside or go to work.

He lived in a big city and worked in the most active commercial area. He complained that traffic congestion and people in the street at the time of entry to his work paralyzed him and did not dare to leave, with the consequent damage in the family environment. We talked several minutes to achieve a suitable climate and reassure it as far as possible and we propose to go out together. We leave the consultation and take a taxi. During the trip, we propose exercises. When we arrive, we insist on Pedro to get off the taxi, cross the avenue and enter his office. He refuses a little but finally trusts and does it.

Eduard – 18 years old

Teenage crisis - Affective dissociation, disharmony in the development and ambivalence of feelings. Rebellion against social life

The psychiatrists consulted by their parents stated that they observed an intense crisis with symptoms of affective dissociation, developmental disharmonies and ambivalence of feelings. They added that he was going through a kind of autistic reverie that served as a shelter or alibi for a "characteristic rebellion" that prevented him from developing the "elementary conduct of social life."

The "therapeutic plan": the first proposed action was, both, to the presentation of the musical "Hair" that was represented in those days in Buenos Aires. Later we talked for a long time in a coffee house.

Zoltan – 47 years old

Refused to undergo surgery to repair serious stomach injuries.

The patient refused to undergo surgery to repair serious stomach injuries. Clinic history: his father's death from stomach cancer and Zoltan is surgically intervened in an emergency on his stomach, in the front during the Second World War. We focused our action on the love he felt for his family and on imagining the pain and grief they would feel if he died, to finally observe that without proper medical care, with a good prognosis in the intervention, everything would be useless.

Andrew – 30 years old and father 65 years old

Young patient, a clinical doctor, asks for psychological assistance for his father in severe heart disease.

The dilemma between continuing his university career or collaborating in the father's construction company. He gets married and invites us to the wedding. There his father talks with us about his faults for the pressures he would exert on his son. Later the son asks us to go to the hospital to assist his father with a severe heart crisis. We were able to be present moments before being transferred to intensive care. He passed away moments later. Our attendance continued at the funeral ceremonies.

Alex – 40 years old

Economics professional in crisis because he is looking for a way to take revenge on the neonatologist who attended his first child, who suffered brain damage attributed to negligent professional treatment.

The child suffered repeated convulsions throughout the day and only his mother could approach or hold him. Any stranger, even a nurse, who tried to touch it caused the seizures. We elaborate on his fatherly situation in psychotherapy. Then we agreed to a visit to his house in which we made a practice of emotional approach to the child who accepted our arms for a moment without making convulsions. We transfer that practice to parents successfully.

 

             The first case in the table is Peter (fictitious name), 35-years-old man, who presented a frequent acute phobic state: the fear of going outside. He lived in a big city and worked in the most active commercial area. He complained that traffic congestion and people in the street at the time of entry to his work paralyzed him and did not dare to leave, with the consequent damage in the family environment. In the interview, to which he attends accompanied by his sister, he complained even of the red lights of the traffic lights that delayed his circulation by car. This had begun more than a year ago, almost imperceptible to his relatives but it was increasing and in the last month before the consultation, he had made crisis with the total refusal to go out. We observe that everything explodes when he feels alone with his anguish in the street. In the conversation of the first interview, other small phobias arise, diverse and almost incomprehensible to the common people. He was very reassured by the presence of his sister who acted, of course, as "phobic companion", an insurance function of the impossibility of suffering "damage" in his trips abroad. The sister waited an hour in the waiting room for the consultation to accompany him later to work or home.

           In his life story, night terrors appear in childhood, fear of dogs transmitted by his mother through excessive prevention of these animals, several moves in childhood and adolescence from smaller cities to the big city, few friendly relationships and none love relationship.

           After several sessions, we propose to the sister that next week bring him to consultation and then leave there. Of course, this is announced to the patient who rejects and distresses him. We ask the secretary to reserve two hours for this proposal. In the following week, perhaps heightened by curiosity, perhaps feeling a good feeling with the psychotherapist and a little motivated by his sister who insists on the convenience of trusting the proposed, attends promptly. His sister retires. Pedro shows (this is what we will call it) restlessness and distrust asking all the time about the next steps in therapy. We talked several minutes to achieve a suitable climate and reassure it as far as possible and we propose to go out together.

           This makes him very anxious; he refuses at first, asks if his sister will be outside or if he will come looking for him later, unmotivated laughter, walks nervously around the room and finally accepts. He insists on the phrase "don't leave me alone" all the time. We leave the consultation and take a taxi. He insists that we don't let him travel alone. The route is quite extensive along a great avenue of the city. During the trip we propose an exercise: to indicate when we pass through a shoe store (a very commercial avenue), then to point out several men's clothing stores, then women's clothing, later restaurants and finally that he remembers how many red traffic lights stopped us at the road (none because it is a fast traffic avenue coordinated at traffic lights). All this allows us to reach our destination without a single mention of your fears of traffic or the possibility of agglomerations once we arrive at your destination. When we arrive, we insist on Pedro to get off the taxi, cross the avenue and enter his office. He refuses a little but finally trusts and does. We return in the taxi to the home of origin.

           An additional anecdote before the analysis of the action: The taxi driver begins the return and asks “- Are you a psychologist? - Yes sir. - Look, I went through the same thing that surely happened this young man and for many years I had no help to overcome my fears. I wish I had met you then! My father forced me into a car and spent five hours strolling through all the streets of more intense traffic and congestion. When I came down, I cried for two days. Then the need made me become a taxi driver”.

            Peter's positive reaction as that of the taxi driver who both must attend work has a special relationship with the attitude of each of the "behaviour modifiers". The confidence achieved in the first sessions, the departure with the psychotherapist that the patient did not have planned and performed safely, the “exercises” of the journey and the final security in which he could cross the avenue and enter to work allowed the first step of a change that had to be achieved with subsequent consultations which, gradually, he attended without the presence of his sister. Sceptics will ask concerning the departure of a psychologist's consultation - Hasn't the Psychotherapist acted as a new counterphobic figure? Do not.

           The second case is that of Eduardo (fictitious name). A young teenager in crisis (18 years old) came to our office. The psychiatrists consulted by her parents stated that they observed a situation of intense crisis with symptoms of affective dissociation, developmental disharmony and ambivalence of feelings. They added that he was going through a kind of autistic dream that served as a shelter, refuge or alibi for a "character rebellion" that prevented him from developing the "elementary conduct of social life". They would not recommend psychotherapy because they affirmed that "transfer" was not possible with such symptom’s characteristic of a possible psychotic outbreak picture. This diagnosis transmitted to their parents, distressed by what they observed and explained, led them to carry out an additional consultation with a team of psychotherapists in which we participated. The team took advantage of this "possible" diagnosis and "recommended" inpatient treatment to do just the opposite. What mattered to us was “the person”, unique, unrepeatable, free but undergoing an intense adolescent identity crisis.

           We find "affective dissociation" in almost all adolescents. Pointing it out in a specific one (Eduardo) must be accompanied by an in-depth study of family history, the surrounding historical moment, the patient's intellectual capacity and professional opinion on a possible positive prognosis in the performance of individualized psychotherapy, created "to measure" for such a teenager.

           The team proposed that we take care of the main psychotherapeutic part, an active presence of the psychotherapist, reassuring, an intermediary between the exuberant fantasy that such a person produced (drawings, confinement, screaming, negative ideation) and reality. We proposed a "true presence", a "true reality" and a "therapist" who would heal with what he was. Of course, all psychotherapists also go through adolescence with conflicts. None of this was commented. He managed to bring a positive attitude to the encounter, a habitual attitude in our professional practice and life in general. Our Master Frankl always said that "I found meaning in my life by helping others find meaning in theirs." Thus, in this case, aid to the other as a person in the project prevailed, accompanying them in everything they could and appealing to all the values ​​that Dilthey already mentioned and Frankl made of them part of his logotherapeutic theory: values ​​of attitude, that would account of a new possible model. Values ​​of experience, which I have just mentioned in terms of personal history and what has been lived up to that moment. And finally, creative values: the possibility of leaving the strict framework of the so-called “science” and proposing an “appeal” from the therapist to the patient: “Be with me”.

           We started with the "therapeutic plan": the first action proposed was to attend, both, the presentation of the musical "Hair" that was performed in those days in Buenos Aires. A rock opera that portrayed the world of that time: the hippie movement, the anti-war claim for Vietnam, the rebellion and idealism in pursuit of a better world. And also, the sexual revolution.

            Hair marked a "before and after" in the history of musical comedy. Because it was one of the first titles that were not anchored in a plot, but a concept, in a purpose. The show was adapted to the needs of expression of feelings, ideas and community purposes that Eduardo held inside but that he only manifested with screams, obscene, grotesque or aggressive drawings that he drew on the walls of his room or on cardboard that he spun, one with another, like a “collage”. He was (we were) excited and happy during the show. Then, in a pub, the analysis of what was lived and the fundamental ideas projected in the musical. Eduardo was a very intelligent teenager, with abundant philosophical and political readings, so the conversation on these topics continued in several subsequent sessions, already held in the usual consultation. There were other outings: sharing lunch or coffee in a quiet place in the city. Always dialoguing about the meaning of existence, the lack of solidarity in the world with the disadvantaged or the hungry, freedom, its limitations and possibilities, the affective encounter with others or love.

            We had epistolary contact with Eduardo many years later. In a letter, he said: “That I write to you is not a mystery, I was always in “contact” with you. What characterized you and what I try to follow is, precisely, that courage not to hide behind a dogma or behind rigidities that, at this stage of the game, I know that more than seriousness they hide cowardice, comfort and ignorance. You have to be a little more careful than they (the rigid ones) because you assume what you do without having a dogmatic bumper. It is the risk of freedom that you and I talked about so much in those years. Going out with patients to a function or a meeting, drinking coffee, hugging them when their father dies, those things are just like that, being present, just that.”      

 

CONCLUSIONS

           Existential psychotherapy is defined from a philosophical and anthropological basis. It applies the phenomenological method and not based on predetermined techniques. We know from the literature that many existential psychotherapists avoid the techniques based on the fact that the use of any technique or the consideration of statistical elaborations can diminish the essential human qualities (freedom, responsibility, vital project, transcendence) and modify the special relationship of encounter that is promoted in the therapeutic relationship. We emphasize the importance of "presence." This "presence" of the therapist is to be in the "here and now", committed and free of expectations as much as possible. This is what we try to show in this work. This presence is not limited to a specific meeting in space and time. It is a committed presence during every one of the meetings, even those that occur outside the consultation. In that meeting, the therapist tries to put aside all the preconceptions regarding the process ("epojé" of the phenomenological method). With this attitude, the therapist seeks the objective of gaining a "contextual" understanding of the relationship and the patient's experiences. On many occasions, the therapist is aware that certain experiences of both members of the meeting can be significant and offer positive results for the achievement of the objectives of Psychotherapy. We wish to underline that this practice leads to an increase in well-being and the possibility of encountering meaning, except for cases of paranoid alterations, psychotic outbreaks and borderline situations.

           Seligman, M. (1995) and also Wampold and Imel, (2015) state that in general, all forms of psychotherapy are effective and on average most more or less equally useful if they can understand the specific characteristics of the clients to determine the best therapeutic approach for any assisted individual.

           Both in attending the cases mentioned in this work and in so many others in which we have intervened we have found that the positive assessment and empathy of the patient in this different way of psychotherapeutic consultation through the presence of the therapist outside of his practice was highly positive. We have had a special interest in pointing that the central emphasis of the existential psychotherapy proposed here is aimed at finding or realizing the meaning, a matter that is a decisive factor in the improvement of our patients.

 

REFERENCES:

                Frankl, V. E. (1975) The Unconscious God. Pocket Books, New York.

                Frankl, V. E. (1978) The Unheard Cry for Meaning. Psychotherapy & Humanism.  A Touchstone Book, New York.

                Frankl, V. E. (1986) The Doctor and the Soul. From Psychotherapy to Logotherapy. Vintage Books, New York.

                Frankl, V. E. (1988) The Will to Meaning. Foundations and Application of Logotherapy. New York: Meridian Book, New York.

                Frankl, V. E. (1992) Man’s Search for Meaning. Beacon Press, Boston, Massachusetts.

                Fromm, Erik (2005) To Have or to Be? The Nature of the Psyche. Published by Continuum International Publishing Group, London.

                Guberman, M. y Pérez Soto, E. (2005) Diccionario de Logoterapia. Grupo Editorial Lumen, Buenos Aires.

                Laín Entralgo, Pedro (1958) La curación por la palabra en la antigüedad clásica. Editorial Revista de Occidente. Madrid.

                Längle, Alfried (2003) “The Art of Involving the Person” in: European Psychotherapy, vol 4, nº 1, p. 47-58, München: CIP Medien.

                Martínez Robles, Y. A. (2017) Existential Therapy: Relational Theory and Practice for a Post-Cartesian World: Volume 1 – Edited by Círculo de Estudios de Psicoterapia Existencial, México.

                Martínez-Romero Gandos, José (2011) La autotrascendencia de la obra del Dr. Viktor E. Frankl en nuestra práctica logoterapéutica. Published in “Logoterapia: encontrar sentido a la vida”. In: https://logoterapiagalicia.blogspot.com/2011/04/la-autotrascendencia-de-la-obra-del-dr.html  

                Martínez-Romero Gandos, J. (2016) Psicoterapia Existencial: el mito de Perseo y la introducción de títeres en un caso de alucinaciones auditivas. Publicado en la Revista Peruana de Psicología y Trabajo Social. Vol. 5 Nº 1 – January/July, 2016

                Martínez-Romero Gandos, J. (2017) UTILIZACIÓN DE MÁSCARAS EN EL PROCESO PSICOTERAPÉUTICO Teoría y práctica desde un enfoque humanístico-existencial. Publicado en Revista Latinoamericana de Psicoterapia Existencial UN ENFOQUE COMPRENSIVO DEL SER. Nº15.

                Martínez-Romero Gandos, J. (2021) Logoterapia Grupal. Autotrascendencia recíproca. Fundamentación y práctica. Publicado en Amazón Books, en versión papel y e-book. Mayo de 2021.

                Plato (1919) Charmenides. In Dialogs (ed. C.I. Hermann. Vol. 9, pg. 5). Second Edition published by Routledge, New York, USA:

                Seligman, Martín (1995) The effectiveness of psychotherapy. The Consumer Reports study. Published in The American psychologist. University of Pennsylvania, USA.

                Wampold, B. and Imel, Z. (2015) The Great Psychotherapy Debate: The Evidence for What Makes Psychotherapy Work (Counseling and Psychotherapy: Investigating Practice. Second Edition published by Routledge, New Yor, USA.

                World Confederation of Existential Psychotherapies (2016) What is existential therapy?  W.C.E.P. definition. In Revista Latinoamericana de Psicoterapia Existencial. Un enfoque comprensivo del ser.  Nº13. Spanish traslation by Dr José Martínez-Romero Gandos.

                Yalom, I (2002) The Gift of Therapy. An open letter to a new generation of therapists and their patients. Perennial Library, Harper Collins Publishers, U.S.A.

                Yalom, I. (1980) Existential Psychoterapy, Yalom Family Trust, Basic Books. Harper Collins Publishers, U.S.A.