Manuel ha escrito: "Mi artículo de ayer en El Peruano
dedicado a mis compañeros humanistas existenciales, y en especial a los
logoterapeutas El Dr. Frankl, los valores y el sentido Un par de clásicas
preguntas que se nos suele hacer a quienes hablamos sobre el sentido de la vida
es ¿qué sentido tiene la vida? o –de aceptar que la tiene– ¿cómo encontrar dicho
sentido?, ¿por dónde ir? Una aplicación terapéutica del análisis existencial la
brindó el doctor Víctor Emil Frankl (1905-1997), creador de la Logoterapia o
terapia a través del sentido (de logos, sentido, propósito). Y la respuesta que
ensayó Frankl aparece en sus largas publicaciones. Y es que, además de su
célebre obra El hombre en busca de sentido (que primero se tituló Un psicólogo
en un campo de concentración), escribió Psicoterapia y existencialismo, Ante el
vacío existencial y Teoría y terapia de la neurosis, entre otras. Podemos hallar
nuestro sentido vital recurriendo a tres vías o caminos que él llama valores,
pero no en el sentido de los clásicos valores que nos enseñan desde muy
pequeños, ejemplo: responsabilidad, disciplina, honestidad (que están bien dicho
sea de paso); sino entendiendo valores como todo aquello valioso para nosotros,
todo aquello que presenta una gran estimación e importancia para las personas.
La primera de esas vías la llama valores de creación. Trata sobre todo aquello
que podemos entregar al mundo, ofrecer a los demás, por ejemplo, nuestro
trabajo, nuestro arte, nuestro talento. Ejemplo, yo ofrezco al mundo mi poesía,
mi trabajo como mecánico o como enfermera, mi música o mi artesanía, mi canto o
mis conocimientos como docente. En pocas palabras, puedo encontrar algo de
sentido cuando tengo claro qué puedo hacer, qué puedo brindar y me gusta eso que
hago, aquello a lo que me dedico. La segunda forma es por medio de lo que
denominó valores de experiencia, todo aquello que el mundo tiene para ofrecerme,
para regalarme. Para eso se requiere estar atento a lo que la vida me depara;
por ejemplo, un buen concierto, un buen libro, los graciosos chistes de un gran
cómico, un buen partido de fútbol, un hermoso paisaje, las calles de una bella
ciudad a la que llego en un viaje turístico, el calor familiar, el amor de una
bella dama, la alegría y complicidad de los amigos. Todo lo que los demás pueden
compartir conmigo, eso genera bienestar, placer, regocijo. Y el valor de
experiencia cumbre está en el amor, nos dice Frankl. Y la tercera manera es lo
que él bautiza como los valores de actitud, y señala que son los más elevados y
más difíciles que los otros dos por cuanto son propiamente la decisión e
inclinación afectiva con que nos vamos a enfrentar a aquellas situaciones
difíciles que la vida nos deparará, como una enfermedad complicada o terminal,
una tragedia, una crisis financiera, la muerte del ser querido. La actitud es la
manera como vamos a decidir enfrentar esa temporada dolorosa que la vida nos
ponga delante. El dolor, del cual existencialmente no podemos escapar, deberá
ser enfrentado con valentía, fortaleza, aceptación y, por qué no, estoicismo.
Tres maneras que pueden servirnos, sin querer sonar a recetario de cocina, para
afrontar la vida con algo más de apertura, esfuerzo, bienestar y temple. p.d.
escribir mis artículos, entre otras actividades, me llenan de sentido. Y el
sentido no es algo que ya encontré y para toda la vida. Hay que renovarlo
continuamente. Varía, se vuelve más complejo. Disponible en: http://l.facebook.com/l/YAQFTMYMVAQGkLKj_bx_vTO-LNENzL7B2rtaPbvLubqlTMw/www.elperuano.com.pe/noticia-el-dr-frankl-los-valores-y-sentido-49112.aspx" |
Excelente artículo. Sin duda muy claro e insipirador, que nos deja una inquietud por seguir buscando más sobre la logoterapia.
ResponderEliminarEn terapia de pareja, buscamos integrar este enfoque a nuestro trabajo, sin embargo, es un enfoque relativamente escaso en nuestro país.
Pueden visitarnos en: http://www.terapiadepareja-df.com.mx/